Reducir: utilizar, en la medida de
lo posible, menos materias primas (agua, energía, etc.)
Reciclar: utilizar los residuos
para elaborar nuevos productos, por ejemplo: cápsulas de café, tapones de
corcho, botellas de plástico, telas…Con estos y otros muchos materiales se
pueden elaborar bisutería, complementos y manualidades, hechos a mano por ti
mismo.
Reutilizar: dar un nuevo uso a
las cosas cuando todavía son útiles. Reutiliza una lata de conservas para meter
los bolígrafos y lapiceros, un rollo de cartón de papel higiénico para convertirlo
en una caja para regalo.
Siguiendo esta regla contribuyes
a la reducción de residuos y a la mejora del medio ambiente.
¡Sólo hace falta un poco de
imaginación! Sé creativo y hazlo tu mismo.
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